Los griegos apoyaron la continuidad de los conservadores del primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, con un fuerte apoyo en las urnas que al mismo tiempo rechazó el vuelco a la izquierda propuesto por Alexis Tsipras. Tras el escrutinio del 91 por ciento de los votos, la gobernante Nueva Democracia, ND, de Mitsotakis obtuvo más del 40 por ciento de las preferencias y saca más de 20 puntos de ventaja a Syriza, de Tsipras, que solo consiguió un 20 por ciento.